Esta capilla ocupa un retablo rococó procedente del extinguido Convento de la Candelaria (monjas agustinas ermitañas). En la hornacina central se encuentra un conjunto escultórico genovés, atribuido al taller de Domenico Giscardi y fechado en el tercer tercio del s. XVIII. Representa un pasaje del Antiguo Testamento (Tob 6, 1-4) protagonizado por el joven Tobías (s. VIII a. C.) que partió de viaje acompañado por San Rafael para recuperar el patrimonio de su padre. Escenifica este conjunto el momento en que Tobías se baña en el río Tigris y es sorprendido por un pez que intentó devorarle el pie mientras Rafael le indica cómo defenderse.
Por lo relatado en el libro de Tobías, este tema era encargado a menudo por la partida de un hijo, una situación muy frecuente en esta ciudad debido a la actividad mercantil ultramar. Estas imágenes de Giscardi presentan una actitud muy serena, lejos del barroquismo de los primeros escultores genoveses y llenas del espíritu clasicista que hará evolucionar el arte en el Cádiz de finales de la Edad Moderna.
En los laterales están las imágenes de serie de San Vicente de Paúl y Santa Teresa del Niño Jesús (o de Lisieux). El primero es el fundador de las Hijas de la Caridad, conocido como "el padre de los pobres"; la segunda, fue monja carmelita descalza, y es la patrona de las misiones
Comentarios
Publicar un comentario